domingo, 5 de abril de 2015

Hay que hacerse las preguntas correctas ante el regreso de James Rodríguez



Vaya por delante que antes del Mundial 2014 yo ni siquiera sabía de la existencia de este jugador.
Tras su actuación el Brasil y estos meses en el Real Madrid, además de algunos otros videos visionados a posteriori, he sacado algunas conclusiones.

¿Cuál es el verdadero puesto de James Rodríguez?

En mi opinión delantero o media punta. Cerca del área es donde luce su pierna izquierda. Él se intenta acoplar al puesto de volante y trabaja, pero el resuello le dura 30 o 40 minutos. Aparte de mermar su potencial, esta forma de jugar hará que se lesione otra vez. Al tiempo.

¿Qué hueco venía a cubrir su fichaje?

El de Ángel Di María. Yo prefiero el nervio del argentino, su polivalencia y su despliegue físico. Menos estético en principio, pero también capaz de hacer auténticas virguerías con su zurda.

Isco o James, el falso debate.

El verdadero es Bale o James. Respondo rápido: Bale. Hay mucha gente con la escopeta cargada contra el Sr. Alarcón. Aunque no lo parezca. Ellos atizaron esta polémica y, ahora que el Madrid ha bajado su rendimiento, piden sin reparos la salida de Isco del once titular. Todo el mundo sabe que Florentino tiene debilidad por los Benzema, Cristiano, Bale y... James. Son sus apuestas personales.

¿Tiene James calidad para pertenecer a la plantilla blanca?

Sí, pero es difícil que acepte, con el tiempo, el papel secundario que le espera.

¿Vale el colombiano 80 millones de euros?

No. Y es altamente improbable que el club de Chamartín recupere esa cifra o cercana.

¿No es una pena que no esté en un equipo como el Valencia CF?

Jugando en lugar de Piatti, sería un figurón y los ché estarían más cerca de los dos transatlánticos. Todo es cuestión de dinero.

A mí el caso de James me recuerda al de Hagi. Un muy buen jugador que ha de gozar de libertad absoluta y, a ser posible, que todo el equipo juegue para él. Y de grandes actuaciones en Mundiales. Eso sí, menos macarra y más dispuesto a remangarse.

Te da el tiempo justo para leer este artículo antes del partido. De nada.