Luka Modric tiene lo que hace falta para triunfar en el Real Madrid

Venía de hacer una gran temporada en el Tottenham Hot Spurs. Me encantó en la Euro 2012.
El Real Madrid pagó 30 millones de euros por su traspaso.Ya pasada la primera vuelta de la competición, ha disfrutado de minutos pero nunca ha sido titular indiscutible. Ya hay voces que lo tachan de nuevo Van der Vart o Sahin y se especulaba con su regreso a la Premier. Nada más lejos de la realidad. Luka Modric es un pedazo de jugador.

Clarividente, siempre con la cabeza levantada, está al servicio del equipo. A pesar de su limitado físico, su trasiego por el centro del campo es continuo, ofreciéndose a sus compañeros, engranando el juego en corto y descongestionando a las bandas con mucho criterio. Es difícil quitarle el balón y tiene un buen manejo del tempo del partido.

Su virtud es la continuidad, no siendo tan decisivo como Özil en goles y asistencias, pero este es un jugador de momentos, y el croata de partidos enteros. El que colija de mis argumentos que Modric es uno de los muchos engañabobos intradcendentes que han pululado por el medio campo madridista los últimos años, se equivoca.

A sus 27 años, está en su mejor momento. Es un futbolista de trago largo, su labor se nota a la larga. Es un gran jugador con voluntad de ser importante, al que no quema la pelota, cual hormiguita va marcando algun que otro gol, una asistencia por aquí, provocando un penalty por allá, y siempre contribuyendo al juego colectivo. Sí, también en el ámbito defensivo.

Hoy escribo este artículo en defensa de este centrocampista, complementario de los cracks, un apoyo sólido para los inconstantes y un referente al que pasar el balón para la clase media. ¡Hasta la próxima!.