Ya han pasado algo más de 15 días desde que la seleccíon española de balonmano se adjudicó su segundo Mundial. Destacó el regreso a la convocatoria de Albert Rocas y la descollante actuación de jugadores como Viran Morros o Joan Cañellas.Y para mí el "descubrimiento" de Jose Manuel Sierra.
Desde que el mítico David Barrufet dejó la selección en 2009, la portería quedo huérfana. José Javier Hombrados nunca me pareció un portero de garantías. Ni siquiera para su papel de sempiterno suplente, que desempeña desde que tengo uso de razón. Mucho menos para titular. La nacionalización del serbio Arpad Sterbik pareció alejar fantasmas.
A pesar de llevar años pululando por las convocatorias de Valero Ribera, casi siempre condenado al papel de tercer portero, a sus 34 años aún le faltaba su momento de gloria. La lesión de Hombrados meses antes del Mundial de España 2013, le permitió subir un peldaño en el escalafón. Contaría con más minutos.
Y a fé que los aprovechó. Y no en partidos intrascendentes o en minuos de la basura de encuentros ya resueltos. Desde su primer partido contra Argelia hizo gala de sus virtudes: sobriedad, regularidad y un discreto pero confiado temperamento. En un combinado nacional maarcado por un excelente espíritu defensivo y con uno de los mejores porteros del mundo, lo que se le requiere a un portero suplente es que cumpla. Que no le superen los acontecimientos. Le van a llegar menos veces que a los demás. Probablemente no se le requiera más que en 2 o 3 choquess. Y en uno de ellos, en cuartos contra Alemania, cuando el crack de los Balcanes no estuvo inspirado, el onubense Sierra hizo algo más que cumplir. Fue el MVP del partido. Al final del Mundial fue el quinto portero con mejor porcentaje de paradas.
Con la longevidad que caracteriza a los guardametas de balonmano, tenemos Sierra para rato. Yo ya no quiero a otro no sea el del PSG como segundo portero. Es seguro y fiable. Felicidades José Manuel y disculpa que apenas te conociera. A partir de ahora seguiré con interés tu trayectoria, dentro de que, desde la desaparición del GD Teka, no veo mucho balonmano.
En unos días más fútbol, que sé que os gusta. ¡Nos leemos en unos días!.
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